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domingo, 22 de agosto de 2010

mujer y erotismo

MUJER Y EROTISMO.


PSICOLOGO CLINICO & PSICOTERAPEUTA PSICOANALISTA

ALEJANDRO GONZALEZ SORIA

MEDyCA FLUVIAL. LAGO TANGAÑICA #222, ESQUINA RIO SANTIAGO

2258787,2256387, 3221206326, MAIL. psic.alejandro°live.com



Si bien hace ya algún tiempo, o mejor dicho hace ya algunas décadas la mujer ha iniciado una verdadera “revolución” sexual, en donde ha reclamado y pugnado por disfrutar de manera libre de una sexualidad sin tapujos, la cual le corresponde, aún hoy en día estos grandes cambios sociales que la han ayudado a seguir avanzando en muchos aspecto de su vida, en el campo del erotismo (para muchas mujeres) es un campo que tiene muchísimos límites.

Y esto se debe a que sobre todo, a una mujer le resulta realmente imposible alienar el placer que produce el sexo con el amor que puede darle a la persona que está compartiendo con ella durante esos momentos. Definitivamente es cierto que las emociones que se pueden despertar durante ese momento y también, el grado de proximidad afectiva son bastante importantes, también tiene su espacio la pasión entre ambas partes, ya que la atracción física es un factor que también cuenta para los fines del sexo (sin obviar claro está, los sentimientos).

Si miramos el caso de los hombres, estos pueden aceptar de una manera simple y sin hacerse ningún problema este factor de su vida, es decir, el tener sexo sin mayores compromisos. Claro que también hay una sociedad que respalda esta conducta y que al mismo tiempo anima que se comporten de dicha manera.

Y es que en la medida que la sociedad ha reservado el papel reproductivo a la mujer, la sexualidad de esta se ha visto limitada, por lo que el erotismo femenino se ha visto en gran medida poco explorado, y sobre todo por ella misma; en el caso de los hombres cuando estos se acercaban a una mujer entonces, pensaban que lo placentero para ellos era igual de gozoso para ellas.

Sin embargo, yo creo que la mujer es todo un mundo sensual y como tal infinitamente mucho más complejo que el del sexo opuesto, por lo que descubrir tal mundo es una experiencia que puede resultar muy excitante para ambas partes y no sólo para ella. Sin embargo, antes que esta desee compartir su riqueza sensual, es mejor que se desinhiba y empiece por conocer su cuerpo, es decir aprendiendo qué tipo de estímulos lo despiertan y cuáles le dan placer. Así, una vez tenido este propio contacto, ella podrá guiarlo a él de una mera segura, de tal manera que juntos podrán ir aumentando la intensidad de sus relaciones sexuales.

Muchas veces una mujer que no conoce su fisiología, piensa que no tiene deseo sexual o que no está bien capacitada para satisfacer a su pareja y hasta tiene miedo de decírselo a sí misma y peor aún a su pareja pero en realidad, lo que se debe hacer es quitarse esos prejuicios y descubrir las maneras que la pueden llevar a disfrutar de dicho erotismo.

Así, yo creo que el papel de la mujer actual, ese papel pendiente para este nuevo siglo es que ella pueda entender que su sexualidad o mejor dicho, sus instintos sexuales son algo natural, parte de ella, por lo que no debería reprimirlos sino más bien entenderlos y por tanto, disfrutarlos con total plenitud.

Cuando una se siente atraída y luego excitada por un hombre, debe de gozar de esta sexualidad que le compete, lo que no significa que sea libertinaje sino una auténtica libertad sexual, que si una mujer sabe llevar con responsabilidad, sin culpas ni moralidades y por tanto, ningún tipo de vergüenza, entonces, podrá disfrutar de un placer en todas y cada una de las esferas que le competen, es decir, tanto, física, mental y emocionalmente.

El sexo, ante todo, debe llevarse con responsabilidad, es decir, con protección pertinente tanto para preservar la salud como para no salir embarazada. En el primer caso, es a través de las vías reproductivas que se transmiten muchas enfermedades sexuales que en diferentes casos pueden ser curables, tratables o algunas otras simplemente mortales, como en el caso del VIH. Si hablamos de los embarazos, entonces, lo más probable sea que una mujer que desea pasar una simple noche con alguien ocasional, no desee quedar embarazada, por lo que antes de pasar por alguna situación incómoda, es mejor prevenir.



Sin embargo, no se puede negar que cuando dos personas que se conectan y se encuentran en una situación amorosa que es muy apasionada, empieza un juego bastante intenso, donde el goce sexual es una de las cosas más bellas que pueden crear, una situación donde juegan mucho los sentidos y donde la mujer, puede experimentar una fuerza natural e ineludible que enriquece de una manera sensorial y plena su vida.

Por tanto, quitarse falsos tabúes y aceptar que el sexo es algo positivo podría ser un buen punto de partida. La idea es que el camino se siga con naturalidad, es decir mientras se dé el juego de seducir y también ser seducida, y así mismo aceptando un desafío que supone a la pareja de por medio. De esta manera, la intensidad que ambos obtengan, producto de sus relaciones sexuales será cada vez mayor (es decir, tan necesaria de colmar como cualquier otra necesidad humana) y así, con el tiempo, esta necesidad se podrá ir incorporando a la vida de ella, quien podrá caer en la cuenta que cómo se va incrementando su equilibrio y también su plenitud mientras recibe dicha satisfacción.

Con esto quiero enfatizar que no existe mujer frígida, anorgasmica o estrecha, más bien existe desconocimiento, tabúes y aprendizajes limitantes de conocimiento personal y corporal.